y luego ya no podía dormir, porque fuí a comprar café, el cual no me cobraron, entonces con ese dnero compré chocolates y llegué a mi casa y prendí la tele y estaba ahí la fábrica de chocolates y charlie y los boletos dorados y una cascada de chocolate y niños chiqueados y yo comía chocolates y me los pasaba con café y cuando se acabó la película no podía dormir y lloré como dos veces pensando en mi futuro... pensé en una carta que le iba a escribir a mi asesor de tesis diciéndole qe me retiraba.. pensé en lo que les iba a decir a mis papás y pensé en mi futuro haciendo nada.
Ayer ví un documental de Emir Kusturica y lo odié, lo odié por haber encontrado su pasión en la vida y una tan bonita, cerca de gypsi caravans y perros que ladran.
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